El vampirismo, el energético, es mucho más común de lo que se cree y se produce cuando una persona le roba energías a otra.

Cuando se produce de forma consciente es más peligroso, pero suele ser común que aquél que roba energía» a otro lo haga de forma inconsciente.

La mayoría de las personas que se convierten en vampiros energéticos son personas que actúan inconscientemente y no pueden generar su propia energía por eso se acostumbran a sustraer de otras personas.

Se trata de gente que toma la energía de su entorno o de otras personas para su propio provecho. Identificarlos es sencillo; por lo general son personas que sólo piensan en ellas mismas y se vinculan con los otros por conveniencia. Suelen acercarse a los demás para contarles sus problemas o pedirles ayuda. Se comportan como víctimas y tratan de provocar lástima.

Ellos se camuflan en nuestras vidas y nos cuesta rechazarlos porque nos sentimos malas personas evitándolos.

En este taller daremos pautas para no desgastarnos ni entregar nuestra a energía a otros  además daremos tips de protecciones metafísicas que nos ayudaran en el proceso de lidiar y protegernos y finalmente haremos una liberación de energías toxicas que podrían estar en nuestra aura.

La mejor forma de evitar ser victimas de estos vampiros es vibrando en la vibración que nos es propia. Eso se llama armonía. Y para vivir en armonía ayuda realizar cortes y escudos protectores. La mejor sugerencia es trabajar en nuestra evolución espiritual. Para hacerlo, necesitamos incrementar nuestros conocimientos y nuestra sabiduría. Cuanto más sabios seamos, más vamos a acercarnos a vivir en armonía.